AUTORA: Mary Balogh
GÉNERO: Romance histórico
EDITORIAL: Cisne
PÁGINAS: 345
SAGA: Quinteto Huxtable #4
¡CÓMPRALO YA!
Desterrada,
en la indigencia, y tildada de asesina, Cassandra, lady Paget, llega a
Londres en plena regencia, decidida a superar la reptación que la había
precedido a fin de encontrar un rico caballero que pueda devolverla a la
extravagante vida a la que estaba acostumbrada. Pone los ojos en
Stephen, conde de Merton, un hombre con posibles y de aspecto angelical,
que no podría resistirse a ella.
Intrigado por el encanto de Cassandra, Stephen acepta convertirla en su amante. Pero a pesar de su aspecto y su encanto, Stephen no es ningún ángel, y Cassandra no tarda en darse cuenta de que hay que pagar un precio por intentar tentar a uno.
Intrigado por el encanto de Cassandra, Stephen acepta convertirla en su amante. Pero a pesar de su aspecto y su encanto, Stephen no es ningún ángel, y Cassandra no tarda en darse cuenta de que hay que pagar un precio por intentar tentar a uno.
Pero como suele sucederme cuando tomo esas decisiones, una cosa llevó a la otra y, aunque terminé por hacerme con este cuarto ese mismo año, no ocurrió lo mismo con el quinto. Lo dejé pasar y pasar... hasta que llegó el 2018 y me decidí a reservarlo en Re-reads poco después de que abriesen la franquicia en Bilbao. Cuál fue mi sorpresa cuando algún alma caritativa a quien se lo agradezco infinitamente, se acercó a la tienda a venderlo... y me contactaron. Una vez que ya tenía los cinco en mi poder decidí que iba siendo hora de finalizar otra de mis interminables sagas comenzadas.
—Algún día aprenderás que el amor no siempre te traiciona, Cass.
Entre los dos personajes que quedan por protagonizar sus historias, Stephen y Constantine, admito que el primer y actual protagonista es el que menos me intrigaba. A ambos los conocemos desde el primer libro y la verdad es que no se nos da mucha información de ninguno pues las chicas y hermanas de Stephen llevan la voz cantante en los anteriores, pero el hermano pequeño del clan Huxtable es el que, en apariencia, tiene menos chicha. Es un hombre bueno, humilde, sincero, cariñoso... todo lo positivo que te puedas encontrar lo tiene él: apuesto, guapo, angelical, rubio con ojos azules... Llamadme clásica, pero me atraen más protagonistas masculinos gamberros, morenos y diabólicos.
Pero al final he de admitir que esto juega a su favor. En esta ocasión Mary da la vuelta a la tortilla, y en lugar de ser ella la recatada con buena reputación que se comporta bien en todo momento y él el canalla con dinero y título que no es nada respetable, nos encontramos con una mujer arruinada, acusada aunque no legalmente sí socialmente de haber asesinada a su marido a sangre fría que se encuentra en la ruina no solo social sino también económica. Con su institutriz de toda la vida, su ama de casa y la hija pequeña de esta por únicas compañeras, se encuentra ante la tesitura de necesitar desesperadamente apoyo económico, ¿y qué mejor forma de conseguirlo que seduciendo a un rico aristócrata?
Pero estaba seguro de haberlo intuido incluso entonces. Segurísimo.
Porque la habría reconocido en cualquier parte del universo en cualquier momento de la eternidad. Su amor.
Salvo que el amor, esa misteriosa, vasta y abrumadora fuerza, no cabía en una sola palabra.
Así es como se conocen ambos personajes, una situación poco habitual y nada recomendable para iniciar un romance. ¿Quién quiere comenzar su relación pagando los servicios sexuales de su acompañante? Pero para equilibrar la balanza tenemos a Stephen, una hombre como os he dicho perfecto, que tiene conciencia y a quien, si bien ella le atrae sobremanera, no le gusta la situación en la que se encuentran.
La verdad es que Balogh, como siembre, consigue equilibrar muy bien todas las situaciones, tanto en lo que a contraste de los personajes se refiere como al nivel de romance, familia, escándalos y acción que tienen sus novelas. En esta ocasión además de los protagonistas tenemos un par de historias secundarias, que no tienen tanta fuerza como la de Stephen y Cass pero que ayudan a que la novela sea más completa. Mary y Alice protagonizan historias sencillas, que dan ese toque extra, romántico e incluso trágico, además de que representan la mayor fuente de amistad femenina que me he encontrado en un libro de romance histórico de este corte, lo cual siempre es agradable.
Por lo tanto, finalmente el conjunto resulta mucho mejor de lo que te puedes esperar en un primer momento, y por supuesto no puede faltar la figura de Con, quien hasta ahora pasa bastante desapercibido aunque esté presente desde el primer libro. Constantine promete ser el chico malo con buen fondo y una historia familiar bastante difícil y triste a sus espaldas, solo espero que esté a la altura de mis expectativas, ya que ahora me pasa justo todo lo contrario de lo que me ocurría con Stephen. Crucemos los dedos.
Por lo tanto, finalmente el conjunto resulta mucho mejor de lo que te puedes esperar en un primer momento, y por supuesto no puede faltar la figura de Con, quien hasta ahora pasa bastante desapercibido aunque esté presente desde el primer libro. Constantine promete ser el chico malo con buen fondo y una historia familiar bastante difícil y triste a sus espaldas, solo espero que esté a la altura de mis expectativas, ya que ahora me pasa justo todo lo contrario de lo que me ocurría con Stephen. Crucemos los dedos.
Resumiendo, una historia en la línea de la autora. Lectura amena, bonita y bastante romántica que por la actitud e historia de cada protagonista, resulta algo diferente a lo que estamos acostumbrados en el género. Al reencontrarme con la saga tras tantos años he vuelto a recordar qué fue lo que me enamoró tanto de la autora, y sin duda tengo que hacerme con los demás libros que se han ido publicando en español bajo su firma.
¡Hola! Estoy leyendo ahora mismo a la autora pero con Melodía silenciosa y la verdad es que me gusta cómo escribe. Un besote :)
ResponderEliminarHola gracias por la recomendación hace tiempo que no me leía a la autora ya me leí los primeros tres libros de esta saga así que me apunto este cuarto, Saludos.
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