Sonny Ardmore es una excelente mentirosa. Miente sobre su padre convicto. Miente sobre su madre echándola de casa. Y miente sobre entrar a hurtadillas en casa de su mejora amiga todas las noche porque no tiene a dónde ir.
Amy Rush es, probablemente, la única persona con la que Sonny lo comparte todo: secretos, ropa e incluso un némesis llamado Ryder Cross.
Ryder es el chico nuevo en el instituto Hamilton y todo lo que tanto Sonny como Amy no pueden soportar, además de un sabelotodo. Pero Ryder tiene una debilidad... Amy. Así que cuando Ryder le envía un email a Amy pidiéndole una cita, las amigas lo ven como una oportunidad para burlarse de él que no pueden dejar escapar.
Pero sin querer Sonny termina hablando con él toda la noche. Y para su horror, se da cuenta de que posiblemente le guste. Solo hay un pequeño problema: él piensa que está habalndo con AMy. Así que Sonny crea un elaborado plan para que Ryder se dé cuenta de que ella es la chica que realmente le gusta.

El verano de ensueño de Whitley Johnson con su padre divorciado se ha convertido en una pesadilla. Acaba de conocer a su prometida y sus histos. ¿El hijo de la prometida? El tío de una noche con el que se acostó el día de la graduación. Simplemente genial.
Lo que es peor, ella no encaja en absoluto con la nueva familia de su padre. Así que Whitley se va fuera. Sale de fiesta. Mucho. Tanto que ni siquiera se percata de las cosas maravillosas que tiene delate de sus narices: una dulce futura hermanastra que es prácticamente la única persona que le ha gustado nunca, y un chico que está buenísimo y no es su hermanastro... al menos, todavía. Necesitará su ayuda para acabar con su rabia y reordenar las piezas de su familia.