Callie Evans prefiere esconderse en la cabina de su canal musical de radio antes que afrontar el hecho de que está enamorada de su mejor amigo, el bombón que es tan popular en el campus, Tayber King.
Tayber convierte el enrollarse en una forma de arte: sin dramas, sin compromiso, sin mentiras... y nadie sale herido. Nadie excepto Callie, claro. Cuando ella ve la oportunidad de explorar el lado más sexy de su amigo a través de un falso perfil online, la aprovecha. Ahora, su desinhibido alter ego Sasha empaña la pantalla, y Callie está rompiendo todas las reglas de Tayber.
Cuando Callie y Tayber empiezan a hacerse más íntimos, online y en la vida real, ella se da cuenta de que tiene que confesar. Y arriesgarse a perderle para siempre.

Ashton Summers está en camino de convertirse en al chica más popular del instituto y nada -o nadie- se impondrá en su camino. Especialmente no Luca Byron, su vecino raro, con sus tatuajes, su música alta y sus ojos verdes.
Luca Byron tiene tres propósitos en la vida: pasar inadvertido el instituto, asegurarse de que su banda de garaje se convierte en algo más que un hobby, y tratar de olvidarse de su insufrible ex-mejor amiga Ashton, a quien no puede sacarse dela cabeza.
Lo último que quieren Ashton y Luca es reavivar su amistad, pero cuando la vida social de Ashton cae en picado, Luca -con su nueva apariencia- es el único que puede ayudarla fingiendo ser su novio. Al principio, estar juntos es insoportablemente irritante, pero las cosas comienzan a cambiar mientras Ashton y Luca van descubriendo las verdaderas razones por las que se separaron hace ya siete años.